Dos miembros del consejo de la ciudad de Nueva York dieron a conocer el “Proyecto de ley para poner fin al bloqueo de Cuba y las restricciones de viaje” en los escalones del Ayuntamiento el jueves por la mañana. El proyecto de ley aboga por ponerle fin al bloqueo estadounidense de Cuba, que comenzó hace 59 años, y por la normalización de las relaciones entre los dos países. Los proyectos de ley también exigen que las personas de los Estados Unidos puedan viajar libremente a Cuba como ya lo pueden hacer las personas de cualquier otro país del mundo. El año pasado, las Naciones Unidas descubrieron que el bloqueo le ha costado a Cuba más de $ 130 mil millones durante seis décadas. El producto interno bruto de Cuba es de $ 87 mil millones. Según las leyes de EE. UU., cualquier empresa o país tiene prohibido hacer negocios con Cuba si también desea hacer negocios con los Estados Unidos. Cuando se ven obligados a elegir entre comerciar con la economía más grande del mundo y la pequeña nación isleña de Cuba, la mayoría de los países y compañías deben elegir a los Estados Unidos, aislando así la economía cubana y sometiéndola a aumentos extremos de precios para el comercio internacional. El bloqueo ha causado escasez de alimentos, combustible, medicamentos y otras necesidades vitales.
La más dañina de las medidas estadounidenses fue la implementación reciente de Trump el 2 de mayo de este año del Título III de la ley Helms-Burton de 1996. Había sido suspendido por presidentes desde la ratificación de Clinton de la ley Helms-Burton. Ahora en vigencia, el Título III da derecho a cualquier corporación o individuo estadounidense, incluso un individuo cubano que se haya convertido en ciudadano estadounidense después de 1959, a demandar a cualquier corporación o individuo en el mundo que invierta en antiguas propiedades estadounidenses en Cuba. Todas las propiedades estadounidenses fueron expropiadas a principios de la década de 1960 por el gobierno revolucionario en el ejercicio de independencia y soberanía de Cuba. Aunque Cuba ofreció una compensación, el gobierno de los Estados Unidos prohibió a las entidades estadounidenses aceptar dicho pago.
Ahora, Carnival Cruise Lines, American Airlines y LATAM Airlines están siendo demandadas hoy por usar los puertos y aeropuertos de Cuba que solían ser propiedad capitalista. La intención obvia del Título III y Helms-Burton es estrangular la economía de Cuba. Y el gobierno de EE. UU. ha bloqueado el acceso del petróleo de Venezuela a Cuba, amenazando a los barcos con sanciones.
Rosemari Mealy, miembro de la coalición CubaSí, explicó a Liberation el impacto potencial del proyecto de ley: “Esta resolución propuesta, la cuál se convertirá en una disposición legislativa, es importante porque está siendo presentada por tres miembros del Concejo Municipal en un área metropolitana importante. en los Estados Unidos de América. Llega inmediatamente después del debate de la ONU que tendrá lugar los días 5 y 6 de noviembre, donde consecutivamente, la comunidad mundial ha apoyado el fin del bloqueo.”
Desde que asumió el cargo, el presidente Donald Trump ha impuesto más restricciones a los viajes a Cuba, al eliminar el categoría de “persona a persona” previamente en operación para viajes individuales y grupales. Existe la idea errónea de que las personas en los Estados Unidos ya no pueden viajar a Cuba. Se permite viajar a Cuba siempre que el grupo de viaje cumpla con ciertas condiciones y pertenezca a ciertas categorías. Sin embargo, las restricciones han causado una disminución en los viajes de personas de los Estados Unidos. El bloqueo se promulgó para castigar colectivamente a los cubanos por atreverse a derrocar al dictador Fulgencio Batista respaldado por Estados Unidos y a nacionalizar las propiedades estadounidenses. El objetivo expreso del bloqueo de los Estados Unidos era hacer la vida en Cuba intolerable al punto de que la gente terminara rebelándose contra el gobierno socialista y disuadir a los pobres de todo el mundo de intentar emular a la Revolución Cubana. En ambos puntos ha fallado. A pesar del bloqueo, Cuba continúa garantizando la atención médica, la educación superior y otras necesidades sociales como los derechos humanos, en lugar de productos que solo están disponibles para aquellos que pueden pagarlos.
Cada año, la Asamblea General de las Naciones Unidas vota abrumadoramente a favor de condenar el bloqueo cruel e ilegal de Cuba. El año pasado, la votación fue de 191-2 a favor de condenar el bloqueo. Los dos votos en contra de condenar el bloqueo provienen de los propios Estados Unidos y el estado apartheid de Israel. El proyecto de ley, copatrocinado por los miembros del consejo Inez Barron, Ydanis Rodrigues y Jimmy Van Bramer, enfatiza que el voto de los EE. UU. en tales órganos, y el bloqueo en sí, no representa el sentimiento de la mayoría de las personas en los Estados Unidos.
